Marca arquidiocesana renovada
Para conmemorar el 175 aniversario de la Archidiócesis de Seattle y planificar nuestros próximos 100 años, hemos renovado nuestra marca archidiocesana. La nueva identidad de marca refleja nuestra
Reflejar el Amor Radical de Cristo
En la fe católica compartida, la Archidiócesis de Seattle encarna el amor radical de Cristo a través de su labor diaria, promoviendo el cuidado y la preocupación por todos los hijos de Dios y la creación.
Somos una Iglesia de acción. Un pueblo de esperanza. Llamada a servir, a acoger, a escuchar y a liderar con valentía y compasión. Arraigados en la verdad del Evangelio y con visión de futuro en la forma de compartirla. En nuestras parroquias, nuestros ministerios y nuestras escuelas católicas, formamos corazones, moldeamos mentes y servimos a los demás, preparando a una nueva generación para liderar con fe, compasión y determinación.
Nos centramos en reflejar el Amor Radical de Cristo en el mundo actual.
- Acogida - Practicar una excelente hospitalidad que garantice que las personas sientan que pertenecen a ella.
- Colaboración - Trabajar juntos para llevar a cabo la misión evangelizadora que Jesús nos encomendó.
- Justicia - Establecer una relación correcta con Dios y con los demás, respetando la dignidad de todas las personas.
- Corresponsabilidad - Planificación y cuidado responsables del pueblo de Dios, la misión y la creación.
- Con visión de futuro - Una Iglesia activa y vibrante que planifica el futuro, adopta nuevas ideas y formas creativas de evangelización.
Nuestro nuevo logotipo es una expresión visual de nuestra misión e identidad
- Jesucristo en el centro en la cruz trilobulada, con sus tres puntas brotadas representando la Trinidad.
- El círculo alrededor de la cruz es la Eucaristía.
- La luz es tanto una invitación a venir como una llamada para que salgamos al mundo y hagamos discípulos.
- La vidriera refleja nuestra tradición católica.
- La cruz en la cima de la montaña es un guiño al noroeste del Pacífico.
Esta nueva marca arquidiocesana no sustituye al escudo oficial de la archidiócesis, que seguirá utilizándose para fines canónicos oficiales.